La Contraloría de Cali, evidenció un detrimento patrimonial que supera los 4.900 millones de pesos fruto de una gestión ineficaz e ineficiente en el hospital ancianato San Miguel.
La auditoría identificó deterioro en la infraestructura física y hospitalaria de la E.S.E que genera riesgo para la salud y la seguridad de los adultos mayores; en este mismo sentido, no se respetan las normas sanitarias para la conservación, el almacenamiento y manejo los alimentos ofrecidos a este grupo de personas.
De igual manera, este ente de control evidenció que la inversión realizada para compras y contratación del personal que atiende a los adultos mayores es realizada de manera irregular, desconociendo las normas que rigen a las Empresas Sociales del Estado.
Este ejercicio fiscalizador arrojó 25 hallazgos administrativos, 16 con presunta naturaleza disciplinaria y 9 fiscales que suman un detrimento de $4.997.753.561; además de un hallazgo con presunta incidencia penal y una solicitud de inicio de proceso sancionatorio por poner barreras de acceso a la información de la comisión auditora.
El contralor, Pedro Antonio Ordóñez, hace un llamado a las autoridades competentes, Procuraduría General de la Nación, Fiscalía General de la Nación para que hagan presencia y brinden la protección que hoy exigen los adultos mayores por la constante violación a sus derechos humanos.
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