RICOS POBRES Y LOS ARREPENTIDOS
- Redacción
- 27 ene
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Por Miguel Ángel Arango

Como político el alcalde de Cali Alejandro Eder, tiene características muy propias en comparación a sus pares de otras ciudades colombianas que llevan más tiempo en el oficio. El de Cali aún es aprendiz de político y es la primera vez que ocupa un cargo de mayor dignidad y que es elegido en las urnas.
Seguro tiene subalternos con más recorrido y obvio, en capacidad de descubrir debilidades de su jefe. También funcionarios que son ineptos y que pretenden ocultar su incompetencia en la amistad con el nominador. En la calle esos funcionarios -los he escuchado- dicen que Eder no gobierna y que no es líder.
No existe un gobierno caleño cohesionado y comprometido y esa debilidad se evidencia en los múltiples cambios que el alcalde ha realizado en su equipo y de pronto exagerados en su primer año de mandato. La gobernadora Dilián Francisca Toro, solo hizo un reacomodo en su equipo y luego de la renuncia del secretario de medio ambiente.
El alcalde de los caleños en mayoría desproporcionada armó su equipo de primera línea con amigos suyos provenientes de otros departamentos y también nombró personas cercanas y que no fueron identificadas como cuotas políticas.
Esas circunstancias han propiciado discriminaciones y aparición de secretarios de primera y segunda categoría. Hay un grupo de esos funcionarios a quienes denominan los “ricos pobres” , que mercan con tarjeta de crédito y otros lo hacen en la plaza de Santa Elena pero que presumen ser millonarios por su consideración de amistad con el alcalde que proviene de una familia con privilegios.
Los “ricos pobres” discriminan a compañeros que no consideran de su clase social. De la cual carecen y su comportamiento no es más que una procaz demostración de un arribismo que no tiene explicación.
Hay otro sector del grupo de empleados de Eder que se autodenominan “los arrepentidos”. Así se presentan y lo disfrutan. Son personas que se ilusionaron con la elección de Alejandro Eder y asumieron que habían ganado el baloto. Seguro pensaron que en seis meses estarían viviendo en Alto Pance y viajarían por todo el mundo y se tomarían fotos para publicarlas en Instagram como hicieron y hacen los amigos del exalcalde Jorge Iván Ospina.
Pero “los arrepentidos” que provienen de la vieja clase política se frustraron porque no han encontrado ni encontraran la gallina de los huevos de oro. El primero de noviembre del año 2023 y a las pocas horas de conocerse el resultado de las elecciones se proclamaron triunfadores porque Eder tuvo presencia mínima de políticos para derrotar a Roberto Ortiz.
Los dos bandos son nocivos para el alcalde. “Los ricos pobres” que discriminan estratos cuatro y cinco y que posan de hablarle al oído a Alejandro de temas terrenales y de los que no lo son. Hacen daño los “arrepentidos” que solo devengan un salario y que no encuentran ingresos extras. Son los que conspiran en privado y hacen ver al nominador como el más incompetente de los mortales.
¿MENTIRAS?
El ex congresista Ramiro Varela Marmolejo, en su periódico Cali Escribe dijo que no cree que este gobierno en su primer año haya recuperado 200 kilómetros de vías como lo hacen creer a la ciudadanía. El señor que es ingeniero tiene argumentos válidos para refutar las cifras de la administración.
Sobre esas mediciones la concejala Ana Erazo, también es escéptica ya radicó derechos de petición para cotejar la información. Otros políticos tienen fotos para demostrar que repavimentaron cuadras enteras y solo era necesario tapar dos o tres huecos. A los periodistas nos enviaron información sobre la recuperación de la carretera Cali-Jamundí pero solo taparon dos huecos y el resto parece una pista de Cross.
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