Por Joaquín Cavanna
Foto por 2022 Getty Images
Gimnasia Artística
No sólo es el presente de la gimnasia artística de Colombia, sino que se perfila como uno de los grandes referentes de la especialidad para todo Sudamérica. Ángel Barajas, la joven estrella colombiana de la gimnasia obtuvo una cuota para los Juegos Olímpicos de París 2024 con apenas 17 años y le puso una guinda al postre de una carrera precoz y sumamente exitosa.
El nacido en Cúcuta en 2006 confirmó la plaza el sábado durante su participación en la Copa del Mundo de Gimnasia Artística de Doha y en la que confirmó su lugar en lo más alto de la clasificación de atletas elegibles de barras paralelas.
En esta competencia, las cuotas olímpicas en juego eran obtenidas bajo el nombre del atleta, los respectivos Comités Olímpicos Nacionales (CON) tienen la autoridad exclusiva sobre la representación de sus respectivos países en los Juegos Olímpicos, por lo que la participación de cada atleta en los Juegos de París dependerá de la selección de su CON para representar a su delegación en París 2024.
Pero, ¿quién es este joven que parece llevarse el mundo de la gimnasia artística por delante? ¿De dónde salió este atleta de apenas 17 años que fue catalogado por la propia Federación Internacional de Gimnasia (FIG) como “el gimnasta más fascinante surgido de un país sudamericano en los últimos años”?
Una infancia dura y unos hábitos de entrenamientos ligados al sacrificio y al compromiso moldearon a este joven atleta ya llena de orgullo a su país.
A continuación, Olympics.com te contará cinco aspectos de la vida de Barajas que quizás no sabías y ayuden a conocer más a fondo al gimnasta.
A los 4 años, su amor a primera vista con la gimnasia
Según cuenta su madre Angélica Vivas, desde los 4 años, Ángel Barajas empezó a desarrollar su amor por las acrobacias y por la gimnasia.
"Desde muy pequeño era así. Veía lo que hacían en 'Lazy Town', un programa de televisión, e imitaba todos esos saltos. Se tiraba desde el clóset a la cama, pero nunca le pasó nada", aseguró Vivas en una entrevista al diario El Tiempo.
Barajas recuerda hacer medias lunas desde muy pequeño y que, una vez que un vecino lo vio realizando piruetas en el barrio, le recomendó a su madre llevarlo a un gimnasio.
"Yo fui, pero no me gustó. Eran puras niñas las que entrenaban y por eso no volví. Pero luego regresé y seguí haciéndolo", detalló el propio gimnasta en el mismo artículo.
Infancia con pocos recursos
Los primeros años de vida no fueron fácil para la familia Barajas, en Cúcuta. A sus 6 años, Barajas ya no vivía con su padre y los ingresos económicos de la familia eran muy escasos.
La madre Angélica había trabajado como manicura y en una panadería, pero, por consejo de la abuela de la familia, comenzó a dedicar su vida a la crianza del propio Ángel y de sus hermanos Jeison y Youri.
Durante los primeros años de vida de Barajas, su hermano Jeison era el único que ingresaba dinero al hogar, gracias a un trabajo en una pizzería.
Los dos hermanos del gimnasta tuvieron que empezar a trabajar a los 13 años para poder darle un sustento económico a la familia.
Desde hace unos años, la familia vive en la casa de la abuela Nubia, en el barrio Trigal del Norte, en Cúcuta.
El estudio, de manera virtual
Pese a la gran cantidad de entrenamientos, una de las prioridades de Barajas es acompañar su carrera deportiva con los estudios.
Por eso, para poder paliar la enorme carga horaria que le supone la preparación para competir en la élite de la gimnasia artística, el colombiano realiza sus estudios escolares de manera virtual.
De martes a viernes, dedica al menos una hora del día a sus deberes escolares en la Institución Kuepa, de Bogotá.
Por el momento, el joven atleta no definió cuál es el rumbo académico que le gustaría afrontar en los años universitarios. Sin embargo, por el momento se declaró un amante de las matemáticas y con muchas dificultades para aprender inglés.
El rigor de los estrictos entrenamientos
A sus 17 años, la vida de Ángel Barajas no es para nada normal. No dispone casi de tiempo libre para relajarse o para salir con sus amigos. Su vida se arma en base a la cantidad y calidad de los entrenamientos, que encima son diferentes en cada etapa diferente de la temporada.
Desde muy pequeño quedó a las órdenes del entrenador Jairo Ruiz Casas, quien también entrena a su compañero y referente de la gimnasia colombiana, Jossimar Calvo.
Todos los días de la semana, Barajas entrena desde las 7 de la mañana hasta las 12 del mediodía y luego, un segundo turno desde las 13 hasta las 15. La jornada se completa con dos sesiones de gimnasio y con la hora de estudio virtual, entre las 18 y las 19. Luego viene la cena y a dormir hasta el próximo día. Así, cada semana de su vida.
"Además, la alimentación de él es diferente”, recalca su madre Angélica. “Tiene que comer mucha proteína, ensaladas, frutas, todo sin azúcar. Hay que comprar vitaminas para su deporte, estar atentos a la hidratación", detalló.
En tanto, el propio gimnasta tiene claro dónde está su horizonte. “Me esfuerzo todos los días porque me gustaría comprar una casa propia. Ayudar a mi familia como ellos me han ayudado”, aseguró a El Tiempo.
Un aluvión de triunfos en su etapa como juvenil
Si bien lleva poco tiempo en la disputa de campeonatos entre mayores, Barajas logró forjar una trayectoria más que exitosa durante sus años como gimnasta juvenil. Y su palmarés es implacable.
En el Campeonato Panamericano Juvenil de Gimnasia Artística de Guadalajara 2021, el colombiano ganó la medalla de oro en la modalidad de potro con arcos, y el bronce tanto en el concurso individual como en ejercicio de suelo y barra fija.
Un año después llegaron los Juegos Suramericanos de la Juventud de Rosario 2022, donde cosechó siete medallas de oro, incluidos el concurso individual y por equipos. Gracias a su enorme aporte, Colombia lideró el medallero de la gimnasia artística en ese certamen.
En 2023, Barajas brilló en el Campeonato Mundial Juvenil de Gimnasia Artística en Antalya, Turquía. Allí, cosechó el oro en suelo y barras paralelas, la plata en el concurso individual y el bronce en barra horizontal.
Pero allí no termina todo, sino que en este 2024 en el que empezó a competir entre mayores también obtuvo grandes resultados: se llevó el bronce en la barra fija de la serie de la Copa del Mundo en El Cairo, mientras que en la Copa del Mundo de Bakú logró otro bronce en barra fija y la misma medalla en barras paralelas.
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