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"Llamar al 123 de la policía: Un verdadero calvario para los ciudadanos"



En los últimos días, tras los recientes atentados con moto bomba en Jamundí y en el cantón militar de Nápoles, el Coronel Carlos Germán Oviedo Lamprea, comandante de la policía, hizo un llamado a la ciudadanía sobre la importancia de denunciar movimientos sospechosos. Sin embargo, este pedido ha generado un debate sobre la eficacia real de las líneas de emergencia, en particular el 123 de la policía.

Muchos ciudadanos califican la experiencia de llamar a este número como "un verdadero calvario". Las quejas son diversas y preocupantes. Una de las principales críticas es la aparente falta de experiencia y contexto de quienes atienden estas llamadas. Según testimonios, los operadores parecen ser personas muy jóvenes que no comprenden plenamente la urgencia y las implicaciones de una llamada de emergencia.

Un caso ilustrativo es el de un ciudadano que intentó reportar una motocicleta sin placa ingresando a Cali por el sector de Sameco en el norte de Cali. La auxiliar que atendió la llamada insistía en obtener una "dirección exacta" de la moto en movimiento, una petición prácticamente imposible de satisfacer dadas las circunstancias.

Otro incidente reciente en Cali con un bus del MIO que circuló por la autopista sin intervención policial hasta que llegó al Cantón Militar de Nápoles, donde los centinelas tuvieron que intervenir, es otro ejemplo de la desconexión entre la línea 123 y la respuesta efectiva en el terreno. El coronel Oviedo mencionó que no fueron avisados, lo que subraya aún más la falta de eficiencia en el sistema de emergencias.

Estos dos incidentes plantean una pregunta clave: ¿Qué tan eficiente es realmente llamar a esta línea de emergencia? La lentitud en las respuestas y la cantidad de preguntas que deben responderse antes de recibir ayuda son factores que juegan en contra de la efectividad del sistema. Mientras un ciudadano dedica varios minutos a proporcionar información, los delincuentes actúan con una rapidez alarmante.
La preocupación va más allá de la frustración inmediata. Existe el temor de que esta ineficacia pueda llevar a que las personas opten por tomar la justicia por su propia mano, ante la percepción de que las autoridades no responden adecuadamente.

Es imperativo que se implementen mejoras significativas en el sistema de atención de emergencias. Los altos mandos policiales deben establecer directrices claras para garantizar una atención pertinente y eficaz. La capacitación de los operadores debe ser una prioridad, asegurando que comprendan el contexto y la urgencia de cada llamada.

El llamado del Coronel Oviedo Lamprea a la colaboración ciudadana es válido y necesario. Sin embargo, para que sea efectivo, debe ir acompañado de un sistema de respuesta que esté a la altura de las expectativas y necesidades de la comunidad. Solo así se podrá construir una verdadera alianza entre ciudadanía y autoridades en la lucha contra la delincuencia y el mantenimiento de la seguridad.

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